El bombero voluntario del destacamento de José Ignacio, Martín Cuinat, conversó en la Contratapa de la Revista de FM Gente sobre cómo surgió la iniciativa que lleva adelante junto a varios compañeros. Desde hace un año colaboran con la Dirección Nacional de Bomberos en todo tipo de incendios, participaron en el foco de Punta Shopping y en el de La Susana, entre otros. “Nosotros no tenemos limitaciones a la hora de las intervenciones”, señaló.
En José Ignacio no existía destacamento de Bomberos y se estaban registrando varios incendios, por lo que llevó a que un grupo de vecinos y amigos liderado por Joaquín Riubal formara el equipo de bomberos voluntarios.
Junto a sus compañeros trabajaron en incendios forestales, de estructuras, en el del Cerro del Toro en Piriápolis, Punta Shopping y La Susana. Cuinat destacó que en cada uno de ellos adquieren experiencia y se forman como bomberos voluntarios. Todos ellos realizaron una capacitación, pero se aprende en la práctica, señaló.
Cuinat explicó que tiene que haber un apoyo de la familia para poder llevar adelante esta tarea, además de su propio trabajo donde deben entender que es una forma diferente de trabajar. Durante el transcurso del año, aprovechan a capacitarse cuando la zafra de incendios desciende.
Con su trabajo al Este del arroyo Maldonado colaboran con los destacamentos de todo el departamento. Contó que existe la idea de que en el balneario La Juanita, el destacamento permanezca todo el año.
Con respecto al incendio ocurrido en el parador La Susana, el pasado fin de semana, dijo que “hubo una respuesta muy grande de Maldonado” donde todos los recursos fueron puestos a disposición. Calificó el foco de “impactante”, “realmente lo que veía, no lo había visto nunca, un incendio de una magnitud que parecía que se estaba quemando todo José Ignacio”, relató.
El equipo cuenta con un camión autobomba (una donación del gobierno de Inglaterra a Uruguay) que fue utilizado por la Dirección Nacional de Bomberos y luego pasó a manos de privados, en ese momento fue adquirido por Joaquín. Dos de ellos lo conducen, “es un camión que nosotros amamos, pero es de 1956, entonces tiene sus limitaciones”, dijo.
Actualmente manejan la idea de recaudar fondos para comprar uno nuevo.