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Cal destacó que el “polémico” proyecto deja “sentimientos negativos” a los ciudadanos que tienen aprecio por esa zona del departamento de Maldonado.

El legislador comentó que el ministro Robert Bouvier indicó que el proyecto de construcción de 29 edificios está presentado en la intendencia desde el año 2015, cumple con la ley de ordenamiento territorial, pero faltan procesos como un estudio de impacto ambiental.

Flora y fauna del lugar serían afectados. De la reunión se desprendió que los inversores presentaron el proyecto categoría B, que significa que puede haber audiencia pública, pero que no es de gran impacto para el medio ambiente.

Cal explicó que el Ministerio de Ambiente reasignó la categoría, por lo que actualmente es categoría C, mismo nivel que tiene UPM. “Entendemos que en ese sentido se ha hecho un trabajo correcto con respecto a la recategorización del tipo de proyecto que sí claramente tiene un impacto ambiental”, manifestó.

Consultado sobre la viabilidad del proyecto y la postura de la cartera, el diputado dijo que “es un proyecto que todavía tiene mucha agua por correr debajo del puente. Falta una audiencia pública, hay tiempos que hay que cumplir para que el Ministerio de Ambiente se expida”.

La audiencia pública está prevista para después del verano.