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En diálogo con FM GENTE, la Coordinadora del Programa de Prevención y Tratamiento del Juego Patológico y Licenciada en Psicología Gracy Gómez, explicó que, si bien no se tienen datos precisos, en nuestro país se estima que habría cerca de 35 mil jugadores problemáticos.

Asimismo subrayó que por cada jugador compulsivo, se ven afectadas entre 4 y 5 personas más y que cuando la familia toma conocimiento de la problemática la situación ya es “dramática”.

“El jugador por sus características de personalidad va a intentar mantener su problema oculto y en reserva”.

Gómez explicó que como toda patología, tiene grados, y que el verdadero problema comienza cuando la vida del jugador ha sido totalmente captada por el juego, al grado de pasar “24 horas por día” pensando en jugar.

“Es lo mismo que una adicción a una sustancia; en este caso la sustancia es el juego y para comprarla se necesita cierto dinero que siempre creen que van a recuperar”.

En ese sentido, remarcó que la estructura cognitiva de los jugadores no tiene anticipación de riesgo, ya que no se dan cuenta de las consecuencias que puede tener su comportamiento.

“Un jugador tiene un pensamiento muy mágico; se levanta y está lloviendo y eso lo hace pensar que es su día de suerte”.

Por otra parte, aseguró que la posible recompensa económica se convierte en una forma de manejar situaciones problemáticas de la vida cotidiana como ser problemas de pareja, el aburrimiento o incluso problemas orgánicos.

“Puede ser por un caso clínico; una persona que posea una patología crónica que le produzca un dolor permanente y se desconecte solo cuando juega”.

Gómez afirmó que si bien la ruleta, los juegos de cartas o incluso las maquinitas, son algunos de los juegos predilectos, la reciente aparición de los juegos online como ser las apuestas deportivas han “complicado” la situación.

Consultada sobre las franjas etarias más afectadas por esta adicción, aseguró que con mayor frecuencia se empieza a jugar a edades más tempranas y se continúa jugando a edades más avanzadas.

“En el programa no tenemos pacientes menores de edad pero hemos recibió información de que hay chicos de 13 y 14 años jugando a las apuestas deportivas y teniendo problemas serios con el juego. Utilizan cédulas de otras personas o usuarios de amigos que son más grandes para poder registrarse”.

Con respecto a las cuestiones de género, afirmó que en el Río de la Plata, existe una tendencia igualitaria entre ambos géneros pero que a nivel mundial los hombres juegan más que las mujeres.


Para comunicarse con el equipo del Programa de Prevención y Tratamiento del Juego Patológico, llamar al 08008631.