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Poco después de las 13.30 horas de este miércoles, y cuando el comercio funcionaba de forma normal y había varios clientes realizando compras, un desconocido que usaba campera azul y que portaba un casco en su cabeza ingresó repentinamente al local con un arma y de inmediato exigió al propietario y la cajera la entrega del dinero.

De apariencia joven, el asaltante no dudó en apuntar el arma a la cabeza de Martín Barrios y de Natalia, la cajera. También, de acuerdo a las imágenes de las cámaras de seguridad, en un momento apuntó a un par de clientes que estaban en la zona de caja.

En menos de 30 segundos concretó el robo del cual, según información policial, se alzó con unos 40.000 pesos que fueron puestos por Barrios y su empleada en una bolsa.

En el exterior había dejado estacionada una moto PX con la que se retiró rápidamente del lugar.

El hecho quedó totalmente registrado en las cámaras de seguridad del comercio y también hay registro de la explanada del negocio que muestra cuando el desconocido abandona el lugar en el birrodado.

FM GENTE dialogó en el comercio con algunos empleados que estaban presentes al momento del robo y comentaron que, a pesar de la rapidez en la que se concretó el delito, fue un momento de gran nerviosismo dado que el ladrón nunca dejó de apuntarles al tiempo que lo único que exigía era "dame la plata, dame toda la plata".

Al momento no hay detenidos pero la policía trabaja en el caso y recopila, además, imágenes de cámaras del sistema de monitoreo que hay ubicadas en la zona para determinar un posible derrotero del delincuente.

Martín Barrios, propietario del negocio familiar que inició su padre Bruno (fallecido en un accidente de tránsito) fue victima, en enero de 2013, de un ataque a balazos por parte de delincuentes que iban tras la recaudación de su negocio.

Aquel 28 de enero el comerciante se dirigió a depositar, como todos los los lunes, la recaudación del fin de semana del negocio como siempre lo hacía: a la misma hora, llevando el dinero en el mismo bolso, trasladándose de idéntica manera cada inicio de semana.

Poco después de las nueve de la mañana llegó hasta la mini sucursal del Banco República ubicada en el Campus de Maldonado, frente al edificio de la intendencia.

Cuando caminaba hacia la oficina bancaria advirtió que llegaban al lugar dos individuos en una moto, uno de ellos se bajó y se dirigió hacia él de forma decidida.

Barrios intuyó lo que pasaba y comenzó a correr hacia la oficina del Banco República intentando llegar antes que el presunto ladrón.

El desconocido procuró detener a Barrios disparándole a las piernas tres o cuatro veces. Uno de los balazos le interesó una arteria en una pierna, por lo que Barrios comenzó con una pérdida abundante de sangre, pese a la cual siguió corriendo hasta darle el bolso al custodia de la sucursal.

Cuando los asaltantes advirtieron que el golpe se había frustrado por la acción decidida de Barrios, se pusieron en fuga.

Barrios fue intervenido quirúrgicamente para restaurar la arteria afectada por el balazo.

En esta ocasión el robo al supermercado no dejó ningún lesionado y la familia decidió no cerrar el negocio, que siguió funcionando de forma normal durante la tarde atendiendo a los clientes y también a conocidos que llegaban al lugar a preguntar por los hechos e interiorizarse de detalles una vez que se difundió la noticia del asalto.

"Cerrar no, hay que seguir trabajando" dijeron a FM GENTE empleados y otra integrante de la familia Barrios que reemplazó a Martín al frente del negocio durante la tarde para que se retirara a descansar unas horas.



foto portada: captura del video de seguridad