En la jornada de este jueves se lanza una reedición del libro "Una oveja negra al poder" que escribieron los periodistas Andrés Danza y Ernesto Tulbovitz, luego de años de hurgar en las vivencias de José "Pepe" Mujica, donde narran "confesiones e intimidades" del expresidente. Un adelanto de esta actualización fue compartido por sus autores con FM GENTE.
"Esa mañana en la chacra de Rincón del Cerro fue distinta a todas las anteriores. Difícil. Dolorosa. Se estaba muriendo y lo sabía. Lo asumía como otro hecho irrefutable de la naturaleza, como lo hacen los “bichos del monte”, algo que nos había repetido más de una vez casi una década atrás. Pero en esta oportunidad era distinto, mucho más real. La enfermedad, un cáncer de esófago, la edad, cerca de 90 años, las circunstancias, una coyuntura que ya no lo tenía en el rol más protagónico, todo se había alineado", así comienzan los autores el capítulo titulado el "Predicador Laico", donde se acercan al desenlace final de la vida de José Mujica en el último contacto mantenido en distintos meses del 2024..
Dentro de algunas revelaciones que se reflejan en este capítulo está el vinculado al futuro político de su sector, el MPP, y como se proyecta dentro del Frente Amplio.
"Nos habló de Alejandro Pacha Sánchez en la última conversación que mantuvimos. 'Está clarísimo que va a ser candidato en la próxima… Y lo
bien que hace', nos dijo, satisfecho por todo lo que estaba dejando. “Deber cumplido, la barra está preparada”, suspiró con las pocas fuerzas que le quedaban", cuentan Danza y Tulbovitz.
Aquella vez, capaz que, por primera vez, ya no tenía ganas de decirle a la parca “sírvame otra vuelta” como antes había repetido mil veces. Aquella vez era la definitiva y lo sabía a través de la percepción, esa virtud que tanto le había aportado a lo largo de la vida. Le costaba hablar, tenía sus fuerzas mentales y físicas un tanto atrofiadas.
Agregan en este último contacto con Mujica "empezó a largar algunos conceptos referidos a su presidencia que se mezclaban de forma torpe. Las frustraciones por lo no hecho, la angustia por la poca convocatoria para que los jerarcas de su gobierno colaboraran económicamente con el plan de vivienda para los pobres que había impulsado, los secretos detrás del fracaso de una regasificadora con la que había soñado y quiénes eran a su entender los culpables, y muchos otros temas de ese tipo, repasados con ansiedad y un poco de caos. Pero la catarsis se diluyó rápidamente y después llegó el principal arrepentimiento, que vino acompañado de unas pocas lágrimas, esas que de vez en cuando solía soltar José Pepe Mujica. 'Fue muy poco lo que pude hacer para terminar con las injusticias', dijo. 'Las vi todas desde mi lugar y la inmensa mayoría siguen ahí, incambiadas', se quejó". “No supe cómo hacerlo. Me voy con eso atravesado”, confiesa el expresidente en el libro.
" Y hubo un silencio. Después llegó la hora de su principal reivindicación personal: su vida dedicada a la militancia. 'Mi último acto político va a ser mi muerte', dijo, convencido. '¡Sabés lo que va a ser ese velorio!', acotó y esbozó una sonrisa, aunque ya no con la energía que siempre había destinado a ese tipo de reflexiones. Esta vez casi que podía tocar su muerte con las manos y esa cercanía lo tenía afectado", reflexiona en una parte culminante del libro.
El libro en este episodio sumar más anécdotas y vivencias, después de 10 años de su primera edición.
Repasa momentos culminantes como la premonición de que en 2019 el Frente Amplio perdería las elecciones. Recuerdan los autores que "durante un almuerzo en la ciudad de Múnich, en donde habíamos hecho escala en nuestro viaje a Japón, nos había dicho que 'el ciudadano Daniel Martínez' no contaba con su confianza y que ese podía llegar a ser un 'problema' para él. Su
tono fue de broma, pero no tanto. Fue premonitorio, además".
Otro recuerdo que recoge la obra está marcado por la incorporación de Blanca Rodríguez al MPP. Esa presentación la hizo horas después de salir del sanatorio donde había estado internado grave, donde muchos y su entorno principalmente, pensaba que no salía pero lo logró. Después de ese acto su salud comenzó a declinar vertiginosamente como aflojando tensiones tras los objetivos alcanzados, dando paso al reposo del guerrero.