La situación se dio cuando el periodista Ignacio "Nacho" Alvarez había comenzado a revelar delicadas situaciones vinculadas al caso Penadés y de la fiscal que lleva adelante la investigación que a su vez denunció al colega. En determinado momento le ordenaron al conductor a desalojar los estudios ante la amenaza de una bomba, que fue recibida por el 911. Éste se negó en un primer momento a dejar el programa pero luego aceptó ir a una pausa que fue extensa para que actuará la policía y los bomberos.
El conductor dijo que no se iba porque no había ninguna bomba y que pretendían distraerlo para que no divulgara la "bomba" que tenía para dar.
Varios compañeros e integrantes del plantel de Santo y Seña mostraron video y fotografías de policías y bomberos actuando dentro de las instalaciones del canal. Finalmente como señaló el periodista no se encontró ningún artefacto.
Luego de varios minutos, Álvarez volvió al aire y siguió adelante narrando el informe que había anunciado donde reveló mensajes y conversaciones entre victimas del caso Penadés y también de la fiscal Alicia Ghione.
Todo lo difundido dijo que será un escándalo en las próximas horas, donde también aparece involucrado el fiscal de Corte Juan Gómez.
(Fotos: X Pablo Fernández)