La reciente aparición de una serpiente yarará (Bothrops pubescens) en una vivienda en Punta Negra, en el departamento de Maldonado, encendió las alertas sobre la presencia de reptiles venenosos en zonas urbanas entre los ciudadanos.
Este rescate se suma a una serie de intervenciones realizadas por Alternatus Uruguay, una organización especializada en el rescate y cría de especies de serpientes, que ha identificado varios elementos que facilitan la llegada de estos animales a las viviendas.
Según explicaron los expertos, las estructuras que comúnmente se encuentran en los hogares pueden funcionar como "atrayentes" para las serpientes, generando un entorno propicio para su presencia. En este caso, el "llamador" que atrajo a la yarará fue un pallet de madera, un objeto que, al ofrecer refugio y condiciones favorables, puede convertirse en un imán para estos reptiles.
Desde Alternatus Uruguay, señalaron que no existen repelentes eficaces para mantener a las serpientes alejadas, por lo que recomendó evitar la acumulación de materiales como pallets, maderas y escombros cerca de las viviendas. Además, advirtieron que las serpientes no buscan atacar a las personas, pero pueden morder si se sienten amenazadas.
La yarará, un reptil venenoso, no representa una amenaza mortal en Uruguay desde hace más de 30 años, debido a la existencia de un tratamiento específico y gratuito para sus mordeduras. En caso de que se produzca una picadura, las autoridades sanitarias sugieren mantener la calma y seguir una serie de medidas para prevenir complicaciones, entre ellas, no mover el miembro afectado y contactar con el Centro de Información y Asesoramiento Toxicológico (CIAT) al 1722 para recibir asistencia inmediata.